Un congreso en Antioquía.Visita del papa Francisco a Hungria.
Cuenta, el fabuloso Stephen Greenblatt,en su libro ( "Ascenso y caída de Adan y Eva" ),como, "durante la bendición sacerdotal que ponía fin a los cultos del sabbat,todos tenían que inclinar la cabeza,y mantener los ojos bajos hasta que el rabino acabara de pronunciar sus solemnes palabras.Era importantísimo hacerlo,decían,porqué en ese momento Dios pasaba sobre nuestras cabezas,y nadie que viera a Dios,cara a cara podía seguir viviendo".Stephen,no dejaba de darle vueltas a esa prohibición ,porqué ver la cara del señor,debía de ser la cosa mas maravillosa del mundo.Entonces, tomó una decisión trascendental ,levantaría la vista y contemplaría a Dios,por si mismo.Sería algo fatídico y pasarían muchos días antes de poder armarse de valor.Tendría que actuar solo.Por fín,una mañana ,despacio,muy despacio,mientras el rabino entonaba las antiguas bendiciones,levantó los ojos.Entonces,y para su sorpresa, comprobó que "to Dios ",estaba con la vista levantada,no era,...