Al día siguiente llegamos hasta Vilafranca del Penedés.

La visita a Vilafranca del Penedés,nos producía una sensación muy especial,debido,a que algunos de nosotros amábamos el vino.Por supuesto ,un vasito frugal en las comidas,de tal suerte ,que, Anastasia Werston ,( nuestra enóloga ),se encontraba enfrascada en una investigación junto a la universidad de la Rioja,sobre lo promisorio de los taninos del vino ,( especialmente del vino blanco ).Nos dispusimos a cenar en el mejor restaurante de la ciudad ,cuando,al pronto la propia Anastasia ,quiso ,decir a Hermano Othon:estoy casi segura del poder curativo de los hongos,de las bacterias.Así,del mismo modo que pueden inferirse en las vacunas para los humanos,así podrían desarrollarse respecto al reino vegetal.-¿ Quieres con ello decir que pudieran existir vacunas naturales para las plantas ?.-La preguntó Othon .- Por supuesto - respondió ella-,ese día hubiera de llegar.