Del porqué de las cosas.

Nos preocupa perder nuestra calidad de vida,y,no nos damos cuenta, del ,tiempo qué marcan los acontecimientos.España - hoy - huele a preguerra,a esa preguerra, que, quería pasar por aristocrática en los años 30.En realidad,nunca, hemos sabido superar,( como no ha sabido el resto del mundo),la crisis del ocho.Los salarios,se encuentran tan lejos de la familia,los precios son tan incontenibles,la desdicha del agro es tanta,la vida espiritual de cualquier orden es tan perezosa ,el egoísmo de la vida pública es tan notorio, qué,la codicia se ha apoderado del mundo.Ademas de ello, la manera de vivir en democracia, es, cuestionada por ,todos aquellos, cuyo único patrimonio es la deslealtad.Observamos ,a los grandes fiscales,traicionar el derecho ,como,jamas hubiera consentido la conciencia de un Romano...al pronto,el mundo se ha hecho enorme... Alemania,a la que tantos admirábamos ya no habla de paz.Cualquier agente ,es vehículo del temor a una vida sin riquezas.El joven, no es es tratado, como si no tuviera uso de razon,sino que aún más,se espera de ellos que emprendan el camino de las armas ,porque,sus mayores eran confortables comisionistas de Gazprom.Se espera de las mujeres que hagan la guerra,pero, no que florezca en ellas el amor por los niños propios...todo esto lo sobreseemos,cuando,nos nombran por nuestro nombre en el arverno.