Algunas propuestas para la vuelta de la mili.

Quién no es soldado no debe ir jamás a la guerra.Pues ser soldado es uno de aquellos oficios en los que no debe faltar el valor.Si de lo que hablamos es del muro de Adriano,entonces hubiéramos de saber que un jinete Romano bien hubiera de tardar 10 años en ser útil en todos los términos para el combate.Mucho mas allá ,y toda vez que se contemple la película Espartaco,en aquel momento inmortal en el cual el jefe de gladiadores les explica a estos,como deben infringir las heridas,entonces nos damos cuenta de lo vulnerable que es el cuerpo.Millán Astray perdió un ocular en África,el comandante Nelson vivió hasta su muerte episodios de gran valor en Trafalgar,aún contemplando la película "tiburón " ( 1973 ),todavía hoy no nos extrañamos, de que se enorgullecieran hasta ese punto de las heridas del pasado...y es que hay algo en nosotros que nos habla del valor.Ese valor que admiramos hasta el punto de verter las lágrimas.Por eso el momento en el cual ,los muchachos del algodón en "lo que el viento se llevó ",han de confrontar la guerra...son momentos de alegría interminable...lo que vendrá después es lo terrible.