Aquél tiempo de Donald .( Una novela sobre los estados unidos de América ).
Zacarias Oleson ,botones del hotel Excelsior,había tocado - thoc,thoc,thoc - tres veces la puerta de la 3027...Aquella habitación soñadora como todas,y en cuyo interior Volodimir Zelensky se estaba duchando ,mientras cantaba el área de Puccini conocida como "Turandot "...Y es que a su modo ,Voli Zelensky era un gran aficionado a la ópera.En el momento de enjabonarse su mente junto con su cuerpo viajaba...viajaba hasta la pequeña ciudad que lo vio nacer...Aquellos días en los cuales mama se empeñaba en bañarle, en aquél barreño especial para niños apenas mas grandes que un bebé.Después y por el hecho de ser Domingo le vestían con sus mejores ropas, con el objeto de asistir al oficio religioso.Por lo demás,escucho la puerta incrédulo de la eficacia del servicio de habitaciones del hotel.Bajo luego al comedor ,cuando,cerca del hall,una niña de acaso 14 años se mecía a su modo en uno de los sillones bajo la mirada de su abuela.- Doroty,Doroty,cariño...¿ tu crees que eso es propio de una señorita...?.- La preguntó mientras el sr.Zelensky se disponía a tomar un taxi ,en dirección al 1.006 de la avenida de Pensilvania.Cuando por fin consiguió montar en uno,pudo comprobar como el conductor ,( un simpático Chileno ),le invitaba a ponerse el cinturón de seguridad,mientras ,quería enseñarle la ciudad.Y es que Zelensky era un admirador de las grandes capitales Occidentales.Vestido con su uniforme de pequeño brigadier ,ora si...ora también...solía girar la cabecita al contemplar ,este o aquél suceso de veras maravilloso...y entonces una pareja en bici doble,y entonces una hermosa muchacha trigueña.La noche anterior había visto en la ABC aquella película maravillosa titulada .América,América...el sueño imposible de Frank Capra...Por último el vehículo,elegante,señorial,cimarrón se detuvo frente a la casa blanca ,motivando que un delegado de personal acudiera a ayudarlo a abrir el coche...Como...Como...viene usted solo...?.¿ Y no tiene frío..?.- Le preguntó al tiempo que observaba como se subía modestamente la cremallera y no pudiendo evitarlo,tocarse en carrerita parada dos veces los tobillos con las palmas de la manita a modo de gran futbolista...¡ Le esperan sin duda !- Exclamó el delegado mientras le ayudaba con su cartapacio recuerdo de algún chaval caído en Mariupol.Después ,y una vez con su bolsa de deportes, pequeñita ,saludaba a uno y otro lado del "paseo "pues eran efectivamente muchos los que querían saludarle.Cuando giro por la columna color basalto,eran muchos sus paisanos los que pugnaban por verle...Eran camareras del hotel,y otros emigrantes especiales...Gente sin duda maravillosa...gente de Ucrania...su gente.
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