Europa,América,España ,y el grupo de la puebla.

 A sensu contrario de lo que pudiera parecer ,la época está demostrando un interés tan grande para los investigadores ,que,dificilemente pudiera preverse que volvieran a repetirse tal cantidad de variables dignas de encomio.Aparece pues en el horizonte, el fantasma del multiplicador militar como blasón de entremedias del siglo.Y multiplicador militar el cual en su fascinación ,aquello que va a permitir seguro es que si hoy el mundo ya nos parece que va deprisa ,entonces, y a partir de que entre Donald Trump ,ya apenas vamos a poseer fuerzas para agarrarnos el sombrero.El vértigo es santo y seña del momento ,pero,tanto como el vértigo imprimido por la ciencia,asimismo encontramos un handicap en los errores de los distintos gobiernos .Y así ,¿ quién a a pedir cuentas a las autoridades de la república China, por la política del hijo único, que ya esta decrementando la población ?.¿  Cuando va a pedir disculpas Occidente por no prever jamás la crisis de vivienda y la infertilidad consiguiente de la especie ?.¿ Y cuando va a pedir disculpas la federación Rusa por haber comenzado la guerra ?.Pero volvamos al multiplicador dado tras la guerra ,( el gran multiplicador de la ciencia ). y es que pasan dos cosas ,en un primer lugar como después de una guerra ,la ciencia avanza de tal modo que a poco que nos dejemos ir ,el viento del mundo será tan irreconocible que no podremos reconocernos en pocos años.No se pueden comparar los tanques de la guerra Española ( 1.936-39 ),con las antañonas máquinas de matar que eran los panzers y los T- 35 de 1944 en Stalingrado.Efectivamente y por monstruoso que parezca de la suerte de la guerra adviene siempre el progreso técnico.Pareciera ...que jamás pudiéramos desligarnos de semejante monstruosidad...Si ahora repasamos los libros y films de ciencia ficción,al pronto caemos en que apenas ninguno imagina un mundo futuro sin contienda ,sin matanza,sin ego,sin el super yo Freudiano...Incluso Asimov ( que fue el gran líder de su tiempo ),nunca pudo imaginar una especie humana en paz.