Encuentro con el clan de la tortilla

Y es que Sevilla olía a azahar...Sevilla,de algún modo,no pierde su gente...llama poderosamente la atención en la foto ( y las fotos como interpretación de la historia...),como,la espiritualidad de aquella juventud,su limpieza,fue muy superior a cuanto hubiera de venir después.En ausencia de alcoholes y de toda depravación,entre todos aquellos chicos,solo es posible encontrar un botellín...lánguido "cruzcampo ",entre melenitas varoniles de la época,entre minifaldas preciosas en sus despertares...Se era socialista,y aún que hoy quedara trasnochado,se era socialista y obrerista,de una manera muy limpia,se era socialista con base cristiana.Poco imaginaban aquellos jóvenes ,que con sus charlas traerían otra España...poco imaginaban el peso que la historia hubiera de depararles...día felices,al fin...(Shhh...Alfonso tenía mas éxito con las chicas del esperado...)